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Señora Soledá
Diálogos de un escritor viejo con su perrito fiel y con el invasor de su cerebro.
Horácio es un escritor de 70 años, sarcástico y sensible, que enfrenta la soledad con humor ácido y lucidez.
Bianca es la hija de Horácio. Es médica, lesbiana e independiente. Busca la reconciliación sin perder la fuerza.
Botox es un perro pequeño, blanco y peludo, heredado de Clarice. Tranquilo y atento.
Señora Soledá es una exploración sensible e irónica de la mente de Horácio, un escritor de 70 años que vive solo con su perro, Botox. La soledad, aquí llamada Senhora Soledá, es una presencia constante, una compañera íntima con la que negocia la vida cotidiana.
Horácio lo confronta con sarcasmo, inteligencia y una lucidez desconcertante. El libro es un agudo monólogo interior, en el que Horácio revisita recuerdos, arrepentimientos y deseos reprimidos, mientras conversa con sus fantasmas y desafía sus propios límites. No idealiza el envejecimiento; se ríe de él.
Ni siquiera rehúye el dolor, observándolo con cariño e ironía. Botox, el perro heredado de Clarice, su esposa arrebatada por la Señora Derradeira, es más que una mascota; es un confidente silencioso en las noches solitarias y testigo de las preocupaciones de Horácio, incluso las más íntimas.
Señora Soledá es un retrato honesto y provocador de la vejez, la sexualidad y la búsqueda de sentido, incluso al llegar al final. Un libro sobre lo que fuimos, lo que no dijimos y lo que aún se puede experimentar.
Anselmo es un escritor solitario que nunca publica lo que escribe. Sus conversaciones son refugios filosóficos, donde la risa y la desesperación conviven.
Clarice era la silenciosa y enigmática esposa de Horácio, una presencia notable incluso después de Senhora Derradeira.
Luciana, esposa de Bianca. Joven, de entre 30 y 35 años. Tranquila y conciliadora. Impasible ante los prejuicios de género y raciales.
Gabriel es el hijo y la oveja negra, marcado por el dolor, la ausencia paterna y la drogadicción. Carga con un dolor silencioso y una ira contenida.