
Etiopía, situada en el noreste de África e históricamente conocida como Abisinia, es uno de los países más importantes del continente. Con una historia rica y compleja, ha mantenido una independencia continua, a excepción de una breve ocupación italiana en el siglo XX. Su antigua monarquía, con raíces legendarias en el siglo X a.C., fue derrocada en 1974, lo que dio lugar a un período de graves crisis, incluida una hambruna en la década de 1980. Hoy, es una república federal con una de las economías de más rápido crecimiento de África.
El Reino de Axum (siglos I-VII) fue una potencia comercial vinculada al Imperio Romano y Asia. Durante el reinado de Ezana en el siglo IV, se adoptó el cristianismo, convirtiendo a Etiopía en uno de los primeros países cristianos de la historia. Además, Adís Abeba, su capital, alberga la sede de la Unión Africana y de la Comisión Económica de las Naciones Unidas para África, lo que simboliza la resistencia colonial, ya que Etiopía nunca fue colonizada por las potencias europeas.
Etiopía es un país culturalmente rico y diverso, con más de 80 grupos étnicos, siendo los oromo y los amhara los más numerosos. También fue la cuna de una importante comunidad judía y alberga la comunidad islámica más antigua del continente. Reconocido como uno de los orígenes del Homo sapiens, posee uno de los mayores números de sitios declarados Patrimonio de la Humanidad.
Conferencia de Berlín
La Conferencia de Berlín, celebrada entre 1884 y 1885, reunió a las potencias europeas para regular la colonización y división de África. Sin la presencia de representantes africanos, las potencias imperialistas (como el Reino Unido, Francia, Alemania, Bélgica y otros) trazaron fronteras artificiales, ignorando las etnias y culturas locales. El objetivo era evitar conflictos entre las potencias europeas que competían por territorios. La conferencia dio lugar a la intensificación de la "fiebre de tierras" africana, que condujo a la partición de África y al establecimiento de colonias, con graves consecuencias para el pueblo africano, como la explotación, la represión y la desorganización social. |
Con una geografía dominada por las Tierras Altas y el Valle del Rift, Etiopía jugó un papel esencial en la evolución humana y la formación de civilizaciones antiguas, destacándose por sus iglesias talladas en piedra y su café, su significativo aporte al mundo.
Tierra de muchos nombres y orígenes ancestrales
El territorio de Etiopía, a lo largo de la historia, también llamado Abisinia, Axum o Tierra de Punt, posee un rico patrimonio cultural e histórico. El nombre actual deriva del griego Aithiopia, que significa “tierra de caras quemadas”, en referencia a la piel oscura de sus habitantes.
Utilizado desde Homero, en el siglo VIII a.C., el término fue oficializado en 1943 por el emperador Haile Selassie I. Abisinia, ampliamente utilizado por los europeos hasta los tiempos modernos, proviene del árabe Habasha e indica la diversidad de las poblaciones locales. Axum hace referencia al poderoso Imperio Etíope Antiguo, mientras que la Tierra de Punt, mencionada en fuentes egipcias, posiblemente correspondía a la región del Cuerno de África.
Patrimonios Mundiales de la UNESCO
África tiene una rica diversidad de sitios declarados Patrimonio Mundial por la UNESCO, incluidos monumentos tanto naturales como culturales. Entre los lugares más destacados se incluyen el Parque Nacional del Serengeti (Tanzania), conocido por sus migraciones de ñus; el delta del Okavango (Botsuana), uno de los humedales más grandes del mundo; y las pirámides de Giza (Egipto), símbolos icónicos de la antigua civilización egipcia. Los sitios culturales incluyen Lalibela (Etiopía), con iglesias excavadas en la roca, y Tombuctú (Malí), un importante centro de aprendizaje islámico medieval. Además, Robben Island (Sudáfrica) simboliza la lucha contra el apartheid, mientras que Djenné (Mali) conserva la arquitectura tradicional de adobe. |
La prehistoria y la cuna de la humanidad
Etiopía es considerada la cuna de la humanidad debido a importantes descubrimientos de fósiles. En 2006 se encontró el fósil de “Selam”, una niña de Australopithecus afarensis de 3,3 millones de años, el esqueleto infantil más antiguo conocido. Otros descubrimientos, como los fósiles de Homo Sapiens idaltu y Homo Sapiens Idalu, de hasta 230.000 años de antigüedad, refuerzan la teoría de que la región fue crucial para el surgimiento del Homo sapiens moderno.
La prehistoria etíope se remonta a cuatro millones de años, con el Ardipithecus ethiopia, un primate vegetariano que evolucionó hasta convertirse en el Australopithecus afarensis, una especie que ya caminaba erguida. "Lucy", el fósil más famoso de este linaje, fue descubierto en 1974 en la región de Afar y datado entre 3,3 y 3,2 millones de años.
El Homo sapiens, la especie a la que pertenecemos todos los humanos modernos, surgió hace aproximadamente 300.000 años en África. Se caracterizaba por un cerebro muy desarrollado, una capacidad de lenguaje compleja y un razonamiento abstracto. Su anatomía incluía una postura erguida, manos diestras y un cráneo redondeado con una cara reducida. El Homo sapiens, una especie social, formó comunidades organizadas y desarrolló diversas culturas, tecnologías avanzadas y sistemas simbólicos, como el arte y la religión. Su adaptabilidad permitió la colonización de prácticamente todos los ambientes del planeta. Es el único homínido superviviente, habiendo compartido el planeta con especies extintas como el Homo neanderthalensis. |
Lucy es el fósil más famoso de Australopithecus afarensis, una especie ancestral de los humanos. Descubierta en 1974 en la región de Hadar en Etiopía, Lucy vivió hace unos 3,2 millones de años. Su esqueleto, conservado en aproximadamente un 40%, reveló importantes características de transición entre los primates y los humanos modernos. Medía aproximadamente 1,10 metros de altura, tenía un cerebro pequeño (similar al de los chimpancés), pero ya tenía una postura erguida y la capacidad de caminar sobre dos piernas. El descubrimiento de Lucy transformó nuestra comprensión de la evolución humana, demostrando que el bipedalismo precedió al aumento del tamaño del cerebro en la línea evolutiva de los homínidos. |
Monolito es una formación natural o estructura artificial compuesta por una sola piedra sólida. En la naturaleza, suele formarse por procesos geológicos, dando lugar a impresionantes bloques de roca expuestos, como Uluru en Australia. En contextos históricos y arquitectónicos, los monolitos pueden ser obras talladas con fines ceremoniales, religiosos o decorativos, como obeliscos y estatuas. Las iglesias excavadas en la roca de Lalibela, Etiopía, son un ejemplo notable de monolitos hechos por el hombre. El término también se utiliza en sentido figurado para describir algo imponente, indivisible y duradero, como una institución o ideología de gran influencia cultural o histórica. |
Además de los fósiles, las herramientas de piedra, el arte rupestre y los megalitos demuestran la presencia humana a lo largo de la Prehistoria. En los dos primeros milenios a.C., las prácticas agrícolas, la ganadería y las esculturas de piedra eran comunes, aunque sin el predominio de la metalurgia.
La evolución cultural culminó con el surgimiento de la civilización axumita en el siglo I a.C., mientras que las culturas neolíticas persistieron hasta el siglo XIV en el centro y sur del país. Estos descubrimientos consolidan a Etiopía como un hito clave en la evolución humana y el desarrollo de civilizaciones antiguas.
Cronología de los imperios y gobiernos de Etiopía
Reino de D'mt (c. 980 a. C. – c. 400 a. C.) |
֎ Primer reino importante en la región de la actual Etiopía y Eritrea. ֎ Influenciado por la cultura del sur de Arabia. |
Período pre-aksumita (siglos IX al IV a. C.) |
֎ Reino de Daamot (o DMT), considerado el primer reino etíope conocido, ubicado en el norte de Etiopía y Eritrea. |
Período protoaxumita (siglos IV al I a.C.). |
֎ Transición a la formación del Reino de Axum, con cambios sociopolíticos y culturales. |
Reino Axum (siglo I a.C. – siglo VII d.C.) |
֎ Surgir como potencia comercial en el Mar Rojo. ֎ El cristianismo fue adoptado como religión oficial en el siglo IV bajo el reinado de Ezana. ֎ Decadencia con la expansión del Islam y el debilitamiento de las rutas comerciales. |
Periodo de fragmentación (siglos VII-XI) |
֎ Reinos más pequeños y dinastías locales reemplazan a Axum. ֎ El cristianismo sigue siendo un elemento unificador. |
Reino de Zagwe (1137 – 1270) |
֎ Fundada por Mara Takla Haymanot. ֎ Lalibela ordena la construcción de las famosas iglesias excavadas en la roca. ֎ Decadencia debido a la oposición de facciones que reclamaban un linaje salomónico legítimo. |
Dinastía Salomónica (1270 – 1974) |
֎ Fundada por Yekuno-Amlak. ֎ Afirmación de descendencia directa del rey Salomón y la reina de Saba. ֎ Expansión territorial y rivalidad con los estados musulmanes. ֎ Largo período de gobierno intercalado con inestabilidad política. |
Estado moderno (siglo XIX – 1974) |
֎ Unificación bajo el emperador Menelik II (r. 1889-1913). ֎ Victoria en la batalla de Adwa (1896) contra Italia. ֎ Gobierno de Haile Selassie (r. 1930-1974), seguido del golpe militar de 1974. |
El Derg y el régimen comunista (1974-1991) |
֎ Junta militar socialista dirigida por Mengistu Haile Mariam. ֎ Violencia, represión y el período conocido como el “Terror Rojo”. |
República Democrática Federal de Etiopía (1991-actualidad) |
֎ Transición a un gobierno federal multipartidista. ֎ Los conflictos étnicos y las disputas políticas siguen marcando el escenario contemporáneo. |
La Tierra de Punt y su importancia cultural e histórica
La tierra de Punt, mencionada en los registros egipcios, era famosa por proporcionar ébano y mirra, posiblemente situada en Etiopía o Eritrea. Expediciones, como la de la reina Hatshepsut en el siglo XV a.C., demuestran sus antiguas relaciones comerciales. La obra Kebra Nagast consolidó la importancia de Etiopía en el cristianismo al relatar la visita de la Reina de Saba a Salomón y la llegada del Arca de la Alianza. Las iglesias talladas en Lalibela y los monasterios en Tigray resaltan el genio arquitectónico y artístico de Etiopía, que combina influencias bizantinas con elementos únicos, fortaleciendo su papel como centro espiritual y cultural.
A pesar de los desafíos históricos, como los ataques musulmanes liderados por Ahmad Gragn en el siglo XVI y las tensiones coloniales con Italia en el siglo XIX, Etiopía ha mantenido su tradición artística y espiritual. Monumentos de piedra, como las estelas colosales de Axum, dan testimonio de su patrimonio. Textos trilingües en Axum registran la conversión de Ezana al cristianismo. Las conquistas en Yemen consolidaron los logros culturales y el legado artístico de Etiopía.
El Kebra Nagast (o Gloria de los Reyes) es una obra literaria y religiosa etíope escrita en ge'ez, considerada un texto fundacional del cristianismo etíope. Compilado entre los siglos XIII y XIV, narra el origen de la dinastía salomónica, afirmando que los emperadores etíopes descendían del rey Salomón y de la reina de Saba. La obra describe la visita de la reina a Jerusalén, el nacimiento de su hijo Menelik I y el traslado del Arca de la Alianza a Etiopía. El Kebra Nagast combina tradición bíblica, historia y leyenda, y es una pieza central de la identidad cultural y religiosa etíope.19 |
Existieron los períodos Pre-Axumita (siglos IX al IV a.C.) y Proto-Axumita (siglos IV al I a.C.). En el Periodo Preaxumita destaca el Reino de Daamot (o DMT), considerado el primer reino etíope conocido, situado al norte de Etiopía y Eritrea. Los registros epigráficos indican una gran influencia de los sabeos, comerciantes semitas del sur, reflejada en los nombres semíticos y el uso del título “Mukarrib” por parte de sus reyes. Sin embargo, existe incertidumbre sobre el origen indígena o mixto de la población y sobre la relación entre Daamot y el futuro Reino de Axum, ya sea como sucesor, unión de estados o conquista.
El Período Proto-Axumita marcó la transición hacia la formación del Reino de Axum, con cambios sociopolíticos y culturales que incluyeron una reducción de las influencias sabeas y un mayor intercambio con el Valle del Nilo. Los reinos protoaxumitas posiblemente coexistieron y compartieron rasgos culturales como la práctica agrícola, el uso de ge'ez y elementos asiáticos en el arte y la religión.
Influencia sabea en Etiopía
La influencia sabea en Etiopía se remonta al primer milenio a. C., cuando habitantes del Reino de Saba, situado en el actual Yemen, establecieron contacto comercial y cultural con la región de Axum. Esta interacción trajo consigo influencias significativas, como la arquitectura monumental con bloques de piedra, la escritura semítica (que evolucionó hasta convertirse en el alfabeto ge'ez) y prácticas religiosas que se mezclaron con las tradiciones locales. Se pueden ver elementos de la cultura sabea en sitios arqueológicos como los antiguos templos de Yeha. La fusión de estas tradiciones ayudó a dar forma a la identidad cultural e histórica de Etiopía, con impactos duraderos en su sociedad y religión.19 |
Reino Axum
El Reino Axum (siglo I a. C. – siglo VII d. C.) surgió como una potencia estratégica en el Cuerno de África debido a su control de rutas comerciales vitales en el Mar Rojo que conectaban Roma, India y Oriente Medio. Con una economía próspera basada en la exportación de marfil, oro, especias y esclavos, su puerto principal, Adulis, era crucial para el comercio marítimo. Axum fue el primer reino subsahariano en acuñar monedas, símbolo de su fortaleza económica.
El cristianismo fue adoptado en el siglo IV bajo el reinado de Ezana. Con esto, Axum se convirtió en una de las primeras naciones cristianas de la historia. Frumentius, un misionero tirio, influyó en la conversión de Ezana al cristianismo y estableció los primeros vínculos religiosos con la Iglesia egipcia. El rey introdujo monedas con la cruz, consolidando la nueva fe en el reino. Más tarde, en el siglo V, nueve santos bizantinos llegaron a Axum, fundaron monasterios y tradujeron textos cristianos con el objetivo de fortalecer la evangelización.
Otro monarca importante fue Kaleb, conocido por su campaña militar en Yemen y por ser canonizado en la Iglesia Ortodoxa Etíope Tewahedo. Su reinado marcó el inicio de una crisis prolongada, agravada por el fin de la acuñación de monedas y la inestabilidad comercial. La decadencia de Axum se intensificó con la expansión del Islam en el siglo VII, aunque el reino siguió siendo cristiano después de ofrecer hospitalidad a los seguidores de Mahoma en 615-616.
El título Mukarrib, utilizado originalmente por los reyes del Reino de Saba en la Península Arábiga, también influyó en los gobernantes etíopes durante el período pre-Axumita. Los Mukarrib de Saba ejercían funciones tanto religiosas como políticas, sirviendo como intermediarios entre los dioses y el pueblo. Con las intensas relaciones comerciales y culturales entre Sheba y la región etíope, esta designación se adaptó para simbolizar la autoridad sagrada de los líderes locales. Se pueden ver rastros de esta influencia en la adopción de prácticas religiosas y símbolos de poder por parte de los antiguos reyes etíopes, lo que resalta la importancia de la herencia sabea en la formación de la tradición monárquica etíope. |
La caída del Reino de Axum fue causada por factores como la sobreexplotación agrícola, el agotamiento de los recursos naturales y los cambios en las rutas comerciales, que culminaron en un período conocido como la Edad Oscura.
Comercio, arquitectura y religión
Axum surgió como un centro comercial estratégico al exportar marfil, oro, especias y esclavos, al tiempo que importaba seda y vidrio. Adulis, su puerto en el Mar Rojo, era crucial para el comercio marítimo. El reino fue uno de los primeros estados en adoptar el cristianismo en el siglo IV bajo el reinado del rey Ezana, convirtiéndose en una de las naciones cristianas pioneras de la historia.
La arquitectura aksumita se caracteriza por impresionantes monolitos y estelas funerarias, con algunas estructuras que superan los 30 metros de altura. Los aksumitas desarrollaron la escritura Ge'ez y ésta influyó en las lenguas etíopes modernas. Los textos religiosos en ge'ez son fundamentales para la historia del cristianismo oriental.
La tradición etíope, recogida en el Kebra Nagast, asocia a Axum con la Reina de Saba, de quien se dice que visitó al rey Salomón y dio origen a la Dinastía Salomónica con su hijo Menelik I. Axum mantenía relaciones comerciales y diplomáticas con Roma, la India y el Imperio sasánida, y era considerada una de las cuatro superpotencias de la época.
La decadencia del reino comenzó en el siglo VII, impulsada por cambios en las rutas comerciales, el agotamiento de los recursos naturales y la expansión islámica en el Mar Rojo. Sin embargo, la herencia de Axum siguió siendo influyente en la historia medieval de Etiopía.
La leyenda de Judith
La leyenda etíope de Judith (o Gudit) cuenta la historia de una reina guerrera que, según se dice, lideró una revuelta devastadora contra el reino de Axum en el siglo X d. C. Se la describe como una figura despiadada, responsable de destruir iglesias, quemar la capital y eliminar a la familia real axumita. Aunque la historicidad de Judith es objeto de debate, su figura se ha convertido en un símbolo de resistencia y cambio en la tradición etíope. Algunas versiones sugieren que pertenecía a la comunidad judía Beta Israel, mientras que otras la ven como una figura cristiana pagana o disidente, lo que refleja las rivalidades políticas y religiosas de ese período.19 |
Con el ascenso de la DSinastía Zagwe en el siglo XI, el poder político pasó a los Agaw. Este período está marcado por el Reinado de Lalibela, famoso por la construcción de un complejo de iglesias excavadas en la roca. Aunque los Zagwe conservaron las tradiciones aksumitas, enfrentaron el descontento debido a divisiones internas y desafíos regionales, que llevaron a la caída de la dinastía en 1270.
Reino de Zagwe
La Dinastía Zagwe gobernó Etiopía desde el siglo XII hasta el siglo XIII (c. 1137-1270), después de la decadencia del Reino Axum y antes de la restauración de la Dinastía Salomónica. El nombre "Zagwe" deriva del grupo étnico Agaw, predominante en la región de Lasta, donde se encontraba la capital del reino, Roha, posteriormente rebautizada como Lalibela.
Fundada por Mara Takla Haymanot, un comandante militar que llegó al poder en circunstancias poco claras, la dinastía se hizo conocida por su apoyo al cristianismo y a las iglesias monumentales excavadas en la roca de Lalibela. El rey Lalibela destacó por su devoción religiosa y sus proyectos arquitectónicos que simbolizaban una “nueva Jerusalén”. Entre estos edificios se encuentran la Iglesia de San Jorge y más de 1.500 iglesias más excavadas en la roca, consideradas monumentos del arte cristiano etíope.
Iglesias de piedra tallada de Lalibela
Las iglesias excavadas en la roca de Lalibela, Etiopía, son un ejemplo notable de arquitectura religiosa. Construidas en el siglo XII, durante el reinado del rey Lalibela, fueron talladas directamente en la roca para representar una "nueva Jerusalén". El complejo incluye 11 iglesias monolíticas, que destacan por su artesanía y espiritualidad. Las iglesias son un símbolo del cristianismo etíope y siguen siendo lugares de culto activo. Reconocidas por la UNESCO como Patrimonio de la Humanidad, estas estructuras reflejan la importancia cultural y religiosa de Etiopía y la dedicación de los antiguos artesanos en su construcción.19 |
A pesar de sus logros culturales, la dinastía enfrentó la oposición de facciones que afirmaban un linaje directo con la antigua Dinastía Axum asociada con el mito salomónico. Esta rivalidad culminó en 1270, cuando Yekuno-Amlak, supuestamente descendiente del Rey Salomón y la Reina de Saba, depuso al último rey Zagwe y fundó la dinastía salomónica durante siglos.
Aunque los salomoneses los consideraban "usurpadores", la Dinastía Zagwe desempeñó un papel fundamental en la preservación y continuidad de las tradiciones culturales y religiosas de Etiopía durante un período de transición histórica. Además, expandió su territorio hacia el oeste y el sur, conquistando regiones paganas y manteniendo la influencia cristiana en la región.
Mara Takla Haymanot fue un importante gobernante y noble etíope del siglo X, conocido como el fundador de la dinastía Zagwe, que gobernó Etiopía después de la decadencia de la dinastía salomónica. Estableció su base de poder en la región de Lasta, hogar de la famosa ciudad de Lalibela, conocida por sus iglesias monolíticas excavadas en la roca. Se recuerda a Takla Haymanot por consolidar el cristianismo en la región y por mantener una administración centralizada durante un período de inestabilidad. Su nombre, "Takla Haymanot", significa "Plantador de fe". La dinastía Zagwe se asocia a menudo con grandes logros culturales y religiosos en la historia de Etiopía. |
La Dinastía Salomónica y el reino medieval de Abisinia
La Dinastía Salomónica, fundada en 1270 d.C. con Yekuno-Amlak, afirmaba descender del Rey Salomón y de la Reina de Saba, legitimando su poder basándose en el Kebra Negast. Según la tradición, Menelik, hijo de Salomón, trajo el Arca de la Alianza a Etiopía. Sus orígenes se remontan al Reino de Axum (siglos III al VI d.C.), conocido por su comercio con Egipto y Arabia, y por ser el primer estado cristiano africano en el año 350 d.C. Durante el periodo de Axum se creó la escritura Ge'ez y la Iglesia de Maryam Tsion, donde supuestamente se encontraba el Arca de la Alianza, aunque esto nunca ha sido confirmado.
Aunque esta descendencia es discutida, reyes como Zara Yakob (1434-1468) reforzaron la creencia al declararse "hijos de David, hijos de Salomón, hijos de Menelik". Esta conexión sagrada dio al reino una identidad cristiana única, permitiendo al pueblo etíope verse a sí mismo como el "segundo Israel" en una región que era predominantemente musulmana o practicaba religiones africanas tradicionales. La capital de las Salomónidas estaba situada en Amhara, cerca de Addis Abeba.
Hogar del Arca de la Alianza
Para muchos etíopes, el Arca de la Alianza, el cofre sagrado que contiene los Diez Mandamientos entregados a Moisés, no está perdido sino guardado en la Iglesia de Nuestra Señora María de Sión en Aksum. Según la tradición, el Arca fue traída a Etiopía por la reina de Saba tras su visita al rey Salomón en torno al año 950 a. C. La epopeya Kebra Nagast narra cómo Saba, seducida por Salomón, dio a luz un hijo, Menelik, que más tarde viajó a Jerusalén y, tras un acuerdo con Salomón, llevó el Arca a Axum. La historia cuenta que un israelita robó el Arca, dejando una falsificación, y Menelik decidió conservarla en Etiopía, creyendo que era la voluntad de Dios.
El Arca es considerada sagrada por los cristianos ortodoxos etíopes y está fervientemente protegida. Esto quedó claro en el reciente conflicto en el norte de Etiopía, cuando los soldados eritreos intentaron saquear la iglesia. Los jóvenes locales se apresuraron a proteger el Arca, enfrentándose a los invasores en una lucha desesperada para garantizar la seguridad del tesoro sagrado. La devoción al Arca sigue siendo un símbolo de fe e identidad para los etíopes.19 |
El imperio se expandió desde Shoa en el sur hasta el lago Tana en el norte, consolidando rutas comerciales terrestres y aquellas a lo largo del Nilo Azul, que eran más rentables que el comercio costero. A pesar del predominio cristiano, persistieron prácticas religiosas tradicionales africanas, como los sacrificios, lo que demuestra una coexistencia entre el cristianismo y las costumbres locales.
El linaje salomónico y la presencia simbólica del Arca de la Alianza en Axum eran centrales para la coronación de los reyes y la identidad del imperio. La legitimidad religiosa y la expansión territorial configuraron el Reino de Abisinia como un bastión cultural y religioso en África Oriental.
Haile Selassie I (1892-1975) fue el último emperador de Etiopía, que gobernó entre 1930 y 1974. Conocido como el "León de la Tribu de Judá" y reverenciado como una figura mesiánica por el movimiento rastafari, consolidó el poder y modernizó Etiopía, promoviendo reformas políticas y sociales. Durante la segunda guerra ítalo-etíope (1935-1936), resistió la invasión italiana y pidió ayuda a la Sociedad de Naciones. Tras la derrota, se exilió, pero regresó al trono en 1941 con el apoyo de las fuerzas aliadas. Su reinado terminó en 1974 con un golpe militar, que estableció una república socialista ֎
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